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sábado, 21 de abril de 2018

Rubens: pintor de bocetos

Apolo y la serpiente Pitón, boceto de Rubens (1636)
En pocas palabras: Se trata de una exposición cuyo objetivo es llamar la atención sobre la figura de Rubens como pintor de bocetos pintados al óleo. Es decir, bocetos que no consistían en dibujos de tamaño pequeño y en papel sino en auténticos óleos preparatorios para la posterior obra.

Organizadores: Museo del Prado y Museo Boijmans Van Beuningen con el patrocinio de la Fundación AXA y con la colaboración del Gobierno de Flandes.
Descripción: El recorrido consta de 5 salas sin título. La exposición arranca con un panel explicativo de la importancia del boceto como trabajo preparatorio. En este sentido, el folleto define el concepto de boceto como "un cuadro pintado al óleo sobre un soporte de lienzo o tabla como preparación para otra obra".
  • Sala 1ª: Se exponen diversas obras acompañadas de bocetos al óleo realizados por Rubens y otros artistas. Por ejemplo, "La oración en el huerto" (boceto al óleo) de Tintoretto (1600) se expone junto con "Todos los santos", un cuadro abocetado de Rubens (1613). En la misma sala, se expone "El prendimiento de Sansón" y "La ceguera de sansón": 2 bocetos preparatorios de Rubens para un mismo cuadro. En esta primera sala se documenta la forma de trabajar de Rubens con, en primer lugar, dibujos a carboncillo como "Dos hombres luchando" (carboncillo y pluma sobre papel, datado en 1605-08) y, en segundo lugar, el boceto al óleo con color (que era más duradero) como "La pesca milagrosa" (1610). También se exponen bocetos sin terminar o de los que incluso se desconoce el cuadro final para el que se hicieron como "La caza del león" (1615). Especialmente interesante resulta el manuscrito Bordes o cuaderno con apuntes del Hércules Farnesio que Rubens realizó durante un viaje a Italiana.
  • Sala 2ª: La función de los bocetos iba desde enseñar al cliente cómo sería la obra final del encargo o enseñar a los discípulos de su taller lo que quería pero la mayoría se utilizaban para definir la composición de la obra final. En esta segunda sala se exponen pinturas preparatorias o bocetos para encargos: para el techo de la Iglesia de los jesuitas de Amberes (como "La explusión de Adán y Eva del Paraíso" 1620); la serie de la Eucaristía que consiste en bocetos para tapices dedicados a la Eucaristía, un encargo de la Infanta Isabel Clara Eugenia para el Monasterio de las Descalzas Reales (destaca "Los defensores de la Eucaristía" entre los 6 bocetos de esta serie que se exponen); y la serie de Aquiles también para tapices como "Aquiles matando a Héctor" (1635). 
  • Sala 3ª: Se expone el libro "Pompa Introitus" hecho de aguafuertes sobre pergamino iluminados y el boceto de Rubens para la portada hecho en 1638 en óleo sobre tabla (monocromo pues iba destinado a grabado). 
  • Sala 4ª: Esta sala se centra en la representación de alegorías. Por ejemplo, se expone el boceto de Rubens para "Las tres gracias" (1630). También los bocetos para el techo de la Banqueting House de Londres como "La paz abrazando la abundancia" que simboliza la union entre las coronas de Inglaterra y Escocia. 
  • Sala 5ª: En esta sala destaca la vitrina que expone bocetos al óleo para la Torre de la Parada, encargo de Felipe IV a Rubens en 1636. En estos bocetos se aprecian la delgada imprimación que funciona como un fondo; las frecuentes líneas verticales negras para encajar las figuras en la composición; y las líneas pequeñas o marcas incisas en los bordes de la tabla que tienen que ver con la transferencia de estas imágenes pequeñas a cuadros finales de mayor tamaño. Como ejemplo, mencionar "Apolo y la serpiente Pitón" (1636) o "Deucalión y Pirra" (1636).
Lo mejor:  La oportunidad de contemplar y aprender la forma de trabajar de Rubens.

Comentario: Se conocen 500 bocetos pintados por Rubens de los cuales la exposición reúne unos 80. Muchos de ellos proceden de distintas instituciones como el Louvre, el Hermitage, la National Gallery o el Metropolitan de Nueva York además de los conservados por el propio Museo del Prado y el Museo de Boijmans. En conclusión, diría que la exposición es bastante completa. Además, todos conocemos la existencia de dibujos preparatorios pero bocetos realizados a óleo como pintura preparatoria es algo más inusual y Rubens se considera uno de los artistas que más empleó esta técnica. Por ello, el interés artístico de la exposición es indiscutible. Por otra parte, destacar que la exposición incluía numerosos paneles explicativos de las obras que aportaban suficiente información sobre lo que se estaba viendo: no sólo incidían en los aspectos iconográficos de las obras sino que también, y eso es de agradecer, documentaban el proceso creativo de Rubens explicando la función e importancia del boceto en el contexto de la obra final. En este sentido, la exposición es muy completa.    
Puntuación: Sobresaliente. 
Datos prácticos: "Rubens: pintor de bocetos", Museo del Prado. Horario L-S 10h-20h. D-F 10h-19h. Entrada 15 euros.Del 10 abril 2018 al 5 agosto 2018.

In Lapide Depictum: pintura italiana sobre piedra (1530-1555)

En pocas palabras: Se trata de una pequeña exposición (que consta de una única sala) en la que podemos contemplar pinturas realizadas sobre pizarra de Tiziano, Sebastiano del Piombo, Leandro Bassano y Daniele da Volterra.
Organizadores: Museo del Prado con la colaboración de la Fundación Iberdrola. Comisariada por Ana González Mozo, del Museo del Prado.
Descripción:  Se trata de una única sala en la que se exponen diversas obras de pintura sobre pizarra y mármol. En particular, obras del Renacimiento italiano. Partimos de "Teseo y el Centauro" (pintura sobre mármol blanco, la denominada "piel de los dioses" según Plinio) que data de c. 20 a.C. - 37 d.C. para continuar con un óleo sobre pizzara de Tiziano titulado "Ecce Homo" y datado en 1547. También se exponen diversos minerales en una vitrina como yeso selenítico, pizarra, graptolitos y trilobites. El resto de obras consiste en óleos sobre pizarra: "Retrato de un joven" de Da Volterra, y"Cristo con la cruz a cuestas" y "Piedad" de Sebastiano del Piombo. En ellos se puede apreciar cómo sobre el fondo oscuro y la superficie estriada del mineral se crea la ilusión de cuerpos que salen de la roca.
Ecce Homo, óleo sobre pizarra de Tiziano

Lo mejor: La originalidad de la propuesta y el hecho de que algunas obras han sufrido un proceso de restauración antes de ser expuestas. 
Comentario:La propuesta es muy interesante y consta de un trabajo previo de análisis y restauración que la hacen más relevante desde un punto de vista investigador. Eso se traslada a la sala del museo ya que su visita resulta muy atractiva. Personalmente, desconocía la existencia de obras hechas a óleo sobre pizarra y menos aún que Tiziano, del Piombo o Bassano las hubieran realizado por lo que he aprendido cosas y he disfrutado mucho de esta pequeña pero original exposición.
Puntuación: Notable.
Datos prácticos: "In lapide depictum: pintura italiana sobre piedra 1530-1555": Museo del Prado. Horario L-S 10-20h. D-F 10-19h. Entrada 15 euros.Del 17 abril al 5 agosto 2018.

sábado, 14 de abril de 2018

“Duchamp, Magritte, Dalí: revolucionarios del siglo XX"


En pocas palabras: Una exposición realmente completa se expone esta primavera en el Palacio de Gaviria. Se trata de la exposición "Duchamp, Magritte, Dalí: revolucionarios del siglo XX. Obras maestras del Museo de Israel, Jerusalén" que incluye muy diversas obras centradas en dos de las vanguardias más conocidas: dadaísmo y surrealismo.  
Organizadores: La compañía italiana Arthemisia, Arts Projects, la Fondazione Cultura e Arte, el Museo de Israel en Jerusalén, el Ayuntamiento de Madrid y la Embajada de Israel en España. Comisariada por Adina Kamien-Kadzan, comisaria del Museo de Arte Moderno de Israel.
Descripción:  El recorrido consta de 5 secciones delimitadas por colores. Algunas secciones incluyen diversas salas. La exposición arranca con un panel informativo sobre lo que diferencia el dadaísmo del surrealismo y aporta datos significativos sobre su contexto cultural. Se incluye también un video introductivo que pone de manifiesto la importancia y el significado de algunas de las obras que se podrán ver luego durante el recorrido. Finalmente, la audioguía también incluye una introducción sobre dadaísmo y surrealismo. A continuación, comienza el recorrido:
  • "El deseo, la musa y la violencia": Las primeras salas se centran en la relación del surrealismo con la figura de la mujer y del deseo en general. Destacan fotografías de Man Ray como "Magnolia del mediodía" que se exponen junto con las de Dora Maar como "Retrato de Nusch Eluard". Se expone una escultura de mujer con cremalleras en los ojos realizada por Marcel Jean y titulada "El espectro de gardenia". En la segunda sala de esta sección destacan diversas obras como las fotografías de Bayer "El beso"; Brassaï "Cliché Verre"; y Halsman "La calavera de Dalí". La tercera sala de esta sección incluye el famoso "Dalí Mona Lisa" también de Halsman y es en esta sala donde el arquitecto Oscar Tusquets Blanca ha incluido una instalación que reproduce el cuadro de Dalí "Retrato de Mae West que puede utilizarse como apartamento surrealista". La instalación reproduce a tamaño natural el sofá-labios, las cortinas-pelo, la chimenea-nariz imaginadas por Dalí como retrato habitable. La exposición permite al visitante hacerse una foto sentado en el sofá-labios. ¡Toda una experiencia surrealista! :-)
  • "Yuxtaposiciones maravillosas": Esta sección incluye una gran sala diáfana con numerosas obras destacables, entre ellas numerosos ready-mades. Por ejemplo, la famosa "Rueda de bicicleta" de Duchamp;  su"Escurrebotellas" que cuelga del techo; y "50 cm3 de aire de París" en una ampolla de vidrio de Man Ray. También se exponen  ensamblajes (assemblages) como "Lo que nos falta a todos" por Man Ray. En la segunda sala de esta sección hay un espacio dedicado a la mujer artista Hannah Höch que no debe pasar desapercibido. Se expone su obra "Sin título" (1922) que consiste en un collage. En la sala diáfana se expone de la misma artista el excelente fotomontaje titulado "Danza dadá" (1922). 
    Danza Dadá, Hannah Höch
  • "Automatismo y subconsciente": El objetivo de esta sección es poner de manifiesto la relación que el surrealismo tuvo con las técnicas artísticas "automáticas" que eran un reflejo del subconsciente. En esta sección que comienza en el mismo espacio diáfano que la anterior (separado por colores) se exponen un móvil "Sin título" de Calder junto con la obra "Pájaro" de Miró y "Comentarios sobre una región " de Paul Klee. Le sigue otra sala donde pondemos ver "Mujer y pájaro" de Miró junto con "Bailarina española". Especialmente interesante resultan de esta sala las fotografías de gratifis parisinos de Brassaï, apodado por Henry Miller "el ojo de París".
  • "Biomofrismo y Metamorfosis": Según explica el dossier de prensa de la exposición el biomorfismo refleja la preferencia surrealista por las formas ambiguas y orgánicas. Así, destacan las esculturas de Jean (Hans) Arp tituladas "Monumento de una sombra", "Caída" y "Le falta una mejilla". Se expone también el lienzo de André Masson "Goethe y la metamorfosis de las plantas". Se incluye una obra de Leonora Carrington titulada "Ablución de las arpías de Sardanápalo" (1958). También hay obras de Yves Tanguy ("Composición", 1927) y de Max Ernst ("El bosque" realizada con la técnica del raspado o grattage).
    Goethe y la metamorfosis de las plantas, André Masson
  • "El paisaje onírico":  Se exponen "Luz del hogar" de Dorotea Tanning (1952) junto con obras de De Chirico como "El soñador poético" y  de Dalí como "Ensayo surrealista". En la siguiente sala de esta sección hay  una instalación inspirada en la obra de Herbert Bayer "En busca del tiempo pasado" (en la tercera sala de la sección se expone la obra). Se incluyen también fotografías como la de Dora Maar titulada "Fotografía preliminar para 29 rue d'Astorg". Especialmente interesante resulta el lienzo de Paul Delvaux titulado "Esperando la liberación (esqueletos en una oficina)". La sala siguiente incluye el maravilloso y enigmático cuadro de Magritte "El castillo de los Pirineos" (1959) con su paisaje onírico combinado con el resultado ilusionista.Se expone también un boceto de la obra con los comentarios del artista escritos a mano. Muy importante y que no deben pasar desapercibidas a pesar de situarse casi al final de la exposición son las 3 fotografías de la famosa artista Claude Cahun: "Le coeur de pic", "Le coeur de pic -Lámina XVII" y "La carroza de la coronación". Finalmente, el último pasillo de la exposición es otra instalación que reproduce sacos de carbón, inspirada en la obra de Duchamp.
    El castillo de los Pirineos, Magritte
Lo mejor: La notable presencia de mujeres artistas como Hannah Höche, Dora Maar, Leonora Carrington, Dorotea Tanning y Claude Cahun.  
Comentario: Esta exposición incluye obras de muy diversos artistas, todas englobables dentro de lo que se podría denominar arte de vanguardias del siglo XX (de ahí su título de "revolucionarios"). Lo que más me ha gustado de esta exposición es que además de exponer a hombres artistas, han hecho un gran esfuerzo por reunir obras de mujeres artistas. Así, artistas como Claude Cahun, Dora Maar o Hannah Höch están ampliamente representadas en el recorrido. Otra cosa a favor es la destacable presencia de suficientes paneles de información como para que además de mirar y contemplar las obras también podamos aprender y entender lo que vemos. La audioguía facilita la lectura porque incide en determinados aspectos artísticos. Además de los paneles explicativos de las obras y de la audioguía, se puede obtener información rápida sobre cada uno de los artistas expuestos gracias a los paneles específicos que unifican la presencia de obras junto con el nombre del artista. En definitiva, el nivel informativo de la exposición es muy completo y eso es de agradecer. Que además hayan optado por no obviar la presencia de mujeres artistas en los movimientos de vanguardia que comúnmente se asocian más a nombres poderosos de la historia del arte como Duchamp o Man Ray la convierten en una exposición puntera. Me parece que su visita es muy recomendable. Quizás lo único menos favorable es su título porque da a entender que nos vamos a encontrar con una exposición de tres artistas cuando en realidad es mucho más que eso.
Puntuación: Sobresaliente.
Datos prácticos: "Duchamp, Magritte, Dalí: revolucionarios del siglo XX. Obras maestras del Museo de Israel, Jerusalén". Palacio de Gaviria (calle Arenal). Del 10 de abril al 15 de julio de 2018. Entrada 13 euros. Audioguía incluida en el precio. Horario: L-J y D 10h-20h. V-S 10h-21h.

    Sorolla y la moda (Museo Thyssen)

    En pocas palabras: Se trata de una doble exposición, organizada simultáneamente en el Museo Sorolla y en el Museo Thyssen. El recorrido incluye diversas obras de Joaquín Sorolla acompañadas por vestidos de la época y complementos que pretenden ser lo más similares posibles a los que pintó el artista.
    Organizadores: Museo Thyssen y Museo Sorolla. Comisario: Eloy Martínez de la Pera

    Descripción: El recorrido consta de 4 ámbitos o secciones:
    • "Sorolla íntimo": El objetivo de esta sección es poner de manifiesto que Sorolla retrató en numerosas ocasiones a miembros de su familia; en particular, utilizó a su mujer Clotilde García del Castillo como modelo en muchas ocasiones. Como se podrá comprobar a lo largo de la exposición, el recorrido se centra en retratos femeninos (pintados entre 1890 y 1920) con el objeto de poder exponer junto a las obras bonitos vestidos y sombrillas. Así, por ejemplo, destaca en la primera sala un cuadro titulado "Mi familia" (1901) que se expone con una blusa y una falda muy similares a los representados en el cuadro. En la siguiente sala de esta sección, destacan diversos objetos de mobiliario como un costurero de 1905/1925 (procedente del Museo Sorolla pero expuesto en el Thyssen). Muy elegante también resulta el cuadro "Clotilde con traje de nochw" (1910) que se expone junto con un vestido de noche procedente del Museo de Artes Decorativas de París.
    • "El retrato de sociedad": Esta sección se centra en los encargos que Sorolla recibió del rey Alfonso XIII. Junto con diversas fotografías como la de "Sorolla pintando en la Granja" (1907), se expone el "Retrato del Rey Alfonso XIII con uniforme de húsares" (1907) pintado plein air y procedente de una colección privada. Todo ello con un vistoso uniforme de gala de teniente coronel húsares de Pavía que ha sido prestado para la ocasión por el Museo del Ejército. De esta sección, que se articula en diversas salas, podemos destacar también el "Retrato de María Lorente con traje de novia" que se expone junto con un traje de novia diseñado por Montesinos. Se exponen también sombreros, abanicos y zapatos diversos junto con retratos como el de Mrs. Winthrop W. Aldrich (procedente del Metropolitan de Nueva York), de Doña María Allende, de María Luisa Martínez de Tejada... todos ellos expuestos con elegantes trajes de 1900.
    • "El veraneo elegante": No es misterio para nadie que fue en la segunda mitad del siglo XIX cuando se popularizaron los baños en el mar. Así, Sorolla pintó diversas obras donde se representan las playas de España (Santander, San Sebastían) y de Francia (Biarritz). Junto con americanas, canotiers y pantalones, se exponen pamelas y vestidos de verano de algodón. En cuanto a las obras, destacan "Clotilde en la playa" (1904) y la "Instantánea" de Biarritz (1906).
    • "París y la vida moderna": Esta sección se centra en los viajes que hizo Sorolla a París y en su influencia. Allí estudia la alta costura francesa y la plasma en sus retratos. Se exponen diversos dibujos a carboncillo con escenas de cafés (1911). Destaca también la obra "Elena con túnica amarilla" que se expone junto a un vestido Delphos de Fortuny (1920). El recorrido termina en una sala donde se proyecta un video con escenas de París, Londres y Madrid de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. 
    Lo mejor: La idea conceptual de la exposición por su originalidad.
    Comentario:En primer lugar, advertiros que, como siempre que se trata de exposiciones del Thyssen, han vuelto a olvidar a los que visitamos exposiciones con el ánimo de aprender además de mirar. Por ello, la información queda reducida a la audioguía, cuya adquisición es indispensable para poder entender la exposición en su conjunto. Los paneles informativos al lado de las obras solo indican el título, año y procedencia. Nada más. Así que una vez más, todas las explicaciones estaban en la audioguía. Destacar, eso sí, que ahora dan en mano los folletos en la entrada a la exposición. Aunque el contenido del mismo es muy escaso.

    Otro problema es que no se entiende bien cuál es el ejercicio que nos proponen. Las obras que se exponían eran retratos interesantes: algunos procedían de colecciones privadas por lo que resultaba valiosa la oportunidad de verlos. Pero no se incluían explicaciones en paneles de ningún tipo sobre la situación de la obra en la biografía del artista, ni su importancia artística. Todo estaba centrado en la relación entre el traje representado y el traje expuesto. Los trajes que se exponían junto a esos retratos también gozaban de valor intrínseco ya que no se puede negar que no han buscado los vestidos más parecidos a aquellos que había representado el artista en sus obras y, en este sentido, ha debido resultar un trabajo difícil. No obstante, no han aprovechado esta ocasión para ahondar en la historia de la moda del siglo XIX o el valor de las obras de Sorolla. Se han limitado a exponerlas para que las miremos. Sin más. Me parece que la final el ejercicio se queda corto, peca de ingenuidad. Quizás la audioguía aportase algo más de información pero, en definitiva, la exposición por sí sola resultaba un tanto infantil.

    Ya digo que esto no le quita mérito al hecho de que se hayan esforzado por encontrar vestidos y trajes muy similares a los que Sorolla pintó  -que sin duda éste debió ser un esfuerzo importante para los organizadores-, pero a la hora de exponerlos no veo muy bien qué sentido intelectual tiene tal ejercicio. Deberían haber incluido algo más: por ejemplo, aprovechar para recordarnos via paneles infomativos detalles sobre la moda femenina o masculina de la época y explicar la obra de Sorolla a partir de ahí.

    En conclusión, diría que lo más destacable de esta exposición fue su idea conceptual pero la ejecución se quedó algo corta. La inclusión del mobiliario le da un poco más de empaque pero al faltar información sobre dichos objetos, su mera contemplación pecaba de pueril.
    Puntuación: Aprobado.
    Datos prácticos:"Sorolla y la moda". Del 13 de febrero al 27 de mayo de 2018. Precio de la entrada 12 euros + recomendable usar audioguía 4 euros. La exposición consta de otra parte que se expone en el Museo Sorolla. Horario M-D 10-19h. S 10h-21h.